Nuestra escapada a Roma la hicimos desde el puerto de Barcelona donde la compañía Grimaldi tiene una línea directa a Civitavecchia, puerto a 30 Km de Roma, y que , de vez en cuando, saca una oferta que en camarote de 4 personas te sale gratis el coche. A precio similar a un vuelo low-cost te plantas en el centro de Italia con tu vehículo en poco más de una noche de trayecto (salíamos a las 19 horas de Barcelona y llegábamos a las 13 horas del día siguiente) .
El viaje se hizo corto pues sólo paseándote el barco y descubriendo todos los rincones, terrazas, bares, .... tienes entretenimiento asegurado.
Una vez en tierra firme, desembarcamos el coche y nos acercamos hasta el alojamiento que habíamos reservado, una casa de acogida llamada Villa Fátima, junto al Vaticano (http://www.villafatima.it/espa/inde_es.html) y donde las monjas oblatas te acogen en un ambiente de tranquilidad y paz.
Desde allí, bien a pie o bien en autobús (en la misma puerta de la residencia) organizamos nuestras rutas.
Un día se necesita para visitar el Castillo de Sant'Angelo, Vaticano y Museos Vaticanos. Todo indispensable. Aconsejo subir a la terraza superior del Castillo y divisar el Vaticano y la ciudad de Roma. En la Basílica de San Pedro tener en cuenta los horarios pues en invierno los accesos a distintos lugares cierran pronto.
Se necesita otro día para visitar el Coliseo y la antigua Ciudad Imperial así como los alrededores (monumento a Victor Manuel II, museos capitolinos,..)


Lo que sí queda claro tras pasar unos días en Roma es que no será la última vez que la visitaré. Siempre quedan sitios, museos, plazas, mercados,.... infinidad de lugares para volver a recrearse.
Me ha traído buenos recuerdos
ResponderEliminarGracias !!!
Me alegro
EliminarSaludos